Carmen , un año más , una vez más tu hijo primogénito ha cumplido años ayer , 14 de mayo mes de las flores en nuestra tradición secular , mes que tanto te ha gustado siempre porque , además de lo florido y primaveral , era el mes en el que tú también cumplías años , el día 2 , siempre de recordación feliz .
En tiempo normal el día de los cumpleaños , fuera el que fuere el miembro de la familia , significaba una fiesta inacabable desde la mañana hasta la noche , con tres elementos centrales : oir misa de buena mañana , comida jolgoriosa del nucleo familiar y merienda multitudinaria con el resto de la numerosa tribu .
Todo muy compartido , muy patriarcal , porque tú sabes bien que la tribu siempre fue uno de mis fetiches por tradición y herencia familiar , fetiche que tú asimilaste con la mayor naturalidad y contento . Sobre todo el momento de las velas y el " Cumpleaños feliz" cantado a coro , muchos años en español y , cuando fueron creciendo los nietos , también en francés y en inglés . Una gloria ver sus ojos a la espera de que el abuelo partiera y repartiera la tarta en orden de prelación por razón de la edad , dignidad y gobierno , eso sí , comenzando por el que cumplía años , privilegio siempre respetado .
Aunque debo decirte que este año ha sido un tanto diferente de formas exteriores , debido a una maldita pandemia de corona virus , que estamos padeciendo en el más completo confinamiento sin salir de casa .
Yo pertenezco al peor grupo de riesgo por la edad . De manera qu lo seguí a distancia y a traves de los modernos medios audiovisuales .
Se reunieron todos en casa de tu hijo . Idéntico ceremonial , tan sólo con dos ausencias notorias , la tuya y la mía . Pero ello no fué obstáculo para nos consideraran presentes , que el corazón recurre a estas razones cuando las necesita y participa .
Yo estaba en la casa solariega , con todo el territorio para mí . Y para tí , pues obvio es decir que me acompañabas como de costumbre . Y desde aquí los vimos , los oímos y los sentimos palpitar con alegría joven .
Al cabo de las horas , bien entrada la nocche , subí a nuestro dormitorio , que permanece exactamente igual que cuando tú estabas fisicamente aquí . Leí un rato . Y cuando Morfeo decidió que cerrara los ojos , te dije con el mismo fervor de tantos años y tan numerosas celebraciones : " Carmen , ya lo has visto , un año más , un cumpleaños más , y sigo queriéndote ".
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