domingo, 27 de diciembre de 2020

HISTORIA VIVA DE UN PROFEOR ( 26 )

 LAS  OPOSICONES ,  HISTORIA  LARGA  Y  TRISTE



  Con la perspectiva de Año  Nuevo ,  retomo el blog largo tiempo abandonado .  Y lo hago con las tontas oposiciones ,  tan arraigadas en nuestro sistema educativo ,  casi siempre para mal .

   La última entrega terminaba con el intento de renovar los métodos en la universidad ,  un tanto rijosos y obsoletos .  Yo traía una buene actualización pedagógica ,  en parte por mis buenos estudios de Magisterio ,  en parte por la excelencia de mi propio padre .   

   Os pongo al día .  La primera fue para una beca convocada por la diputación de Albacete ,  donde había terminado el bachillerato superior .  No les bastaba el curriculum y nos obligaron a dos ejercicios un poco enrevesados .  Luego vinieron las demás :  Magisterio Nacional ,  Profesores adjuntos de instituto ,  Catedráticos de Instituto ,  Profesor adjunto de universidad ,  Catedráticos de Escuelas Universitarias ,  Profesor Agregado y ,  finalmente ,  Catedrático de Literatura Hispanoamericana ,  ya para el resto de m vida académica .

   Desde el principio mi prédica siempre fué misma :  las oposiciones embrutece ,  no aportan nada nuevo y crean extraños complejos en los candidatos .  Pero no había manera de cambiar el sistema .  Y cuando finalmente lomodificaron un ,  a todo lo anterior añaieron una endogamia universitaria especialmente devastadora .

   Una vez cubierta mi larga y densa cuota ,  comencé las variaciones personales en la universidad ,  como os dije en mi entrega anterior ,  casi todpo basado en la lectura ,  los diálogos ,  los comentarios de texto y las personales redacciones críticas .

   Al principio los alumnos andaban sorprendidos y despistados ,  dados los antecedentes basados en la lección magistral ,  el silencio de los alumnos y los periódicos exámenes escritos a la cza de los errores memorísticos para establecer la criaba de aprobados .

   Con el tiempo ,  los buenos alumnos me agradecían los cambios ,  al punto de que me siento muy orgulloso de una realidad :  docenas de antiguos alumnos que hoy son excelentes profesores de Literatura .

  Pequeña anécdota para terminar hoy .  Mi padre siempre hacía gala de buen humor y de fina ironía .  Cuando se reunía con sus amigos  compañeros y yo llegaba ,  les solía decir :  "Ahí lo tenéis ,  siempre hablando mal de las oposicones y ya sabéis las veces que ha pasado por tales horcas caudinas".  Mientras ,  liaba un cigarrillo de picadura verde .  Que la vida es  "ansí" ,  como gustaba escribir el inefable Pío  Baroja .









R E M E M B R A N Z A S ( 4 )

 LA  FELICIDAD  SÍ  TIENE  HISTORIA

 


 Un dia esquinado ,  el buen escritor suizo  Amiel se levantó triste y dió en decir rotundo :  " La felicidad no tiene historia " .  Yo afirmo que sí la tiene ,  con idéntica rotundidad .

   Es posible que Amiel pensara que una persona feliz no para mientes en su vida ,  está contento y no considera motivos merecedores de reseña y aún de recuerdo .

   Pero pensemos .  La felicidad es una característica intelectual ,  psicológica y física con la que se nace ,  y que puede perfeccionarse con el tiempo .  La felicidad es personal e intransferible ,  depende de cada uno y de su interioridad irrefrenable ,  va con el individuo ,  es una fuerza centrífuga en absoluto interferida por circunstancias externas ajenas a la propia persona .  Lo mismo para los pocos pueblos que , colectivamente , alcanzaron estado semejante .  La felicidad es .

   Cosa distinta es el contento ,  siempre coyuntural y dependiente del exterior ,  de las circunstancias exógenas que invaden al individuo .  Es una fuerza centrípeta que se interioriza y produce coyunturales estados de ánimo placenteros .

   Observad los verbos .  Alguien es feliz ,  alguien está contento .  Hermoso matiz diferencial que aporta con precisión la gramática española ,  siempre magnífica y sabia en sus conceptos y decisiones tanto verbales cuanto escritas . 

  Quien es feliz lo es de manera permanente ,  por acuardo y aceptación completa de todas las circunstancia de la vida entorno ,  tanto agradables cuanto dolorosas y aún trágicas en función del destino .

   Quien está contento lo hace temporalmente , y siempre en relación con las circunstancias y estímulos agradables que los demás y el entorno le propician .  Solamente los tontos dicen estar siempre contentos y felices ,  porque suelen confundir los glúteos con las cuatro témporas .

   La felicidad es un estado vital permanente ,  bajo el prisma y alternancias del placer- dolor .  ael contento es un estado de ánimo pasajero .

   Y ya puestos ,  termino con otra frase de Amiel ,  ésta sí válida para todo el mundo :  " Los hermosos paisajes son estados de ánimo que la Naturaleza regala generosamente a las personas sensibles " .

   

lunes, 21 de diciembre de 2020

HISTORIA VIVA DE UN PROFESOR ( 25 )

 EXÁMENES  PARA  LA  NEGACIÓN  Y  LA NADA



  Los exámenes académicos ,  en la universidad y en cualquier otro nivel de enseñanza ,  nunca sirvieron para mucho .  Si acaso ,  para satisfacer el poco encomiable empeño del profesor por perseguir lo que ignora el estudiante ,  aunque debiera ser al revés .  Ahora recuerdo el triste ejemplo de un compañero de cátedra en la universidad ,  orgulloso de acopiar más de mil estudiantes suspendidos por él y que arrastraban su asignatura convocatoria tras convocatoria .  La ironía es que se trataba de un profesor preparado ,  que explicaba bien sus lecciones magistrales .

   El examen a la vieja usanza viene a ser el desgraciado hermanastro del conocimiento y la sabiduría ,  lo supe desde siempre ,  aunque la burocracia administrativa me obligó a realizarlos bastante tiempo .

   Pero cuando supe que estaba fijo en la universidad ,  se acabó lo que se daba ,  clausuré la comedia y empezamos todos a caminar por las trochas y veredas machadianas ,  dificultosas ,  pero que culminan en el satisfactorio  "rayo de un camino en la montaña" .

  En la escuela que acogió toda mi enseñanza primaria ,  jamás ví a mi padre realizar examen alguno .  Cuando los colegas le preguntaban les ofrecía la misma respuesta :  "Yo hablo todos los días con los alumnos ,  y ellos también .  Sé perfectamente lo que saben e ignoran .  Entonces ¿para qué la tortura inútil de un examen? Se trata de aprender los alfonsinos  "saberes" ,  no de perseguir la ignorancia" .  Lo aprendí en la escuela y bajo su sabia orientación pedagógica .

   Así que ,  llegado que fuí al instituto como profesor ,  me encuentro con los  ERPAS  (no confundir con los herpes) y debo realizar tiempo y molestias a realizar exámenes escrito y guardarlos para cuando venga el inspector .  Inciso :  a la inspección docente   "hay que echarle de comer aparte" ,  como dice mi amigo el talabartero .  Salvadas las honradísimas excepciones ,  un inspector suele ser un  "desertor de la tiza"  ,  según mi amigo el profesor alemán ,  alguien que prefiere la burocracia de un despacho lleno de papelas ,  antes que la hermosa tarea de abrir cabezas adolescentes para insuflarles conocimiento ,  y menos trabajo ,  menos problemas de convivencia y mejor salario , "qué le vamos a hacer" querido vecino comentarista .  Y perdonad que siga citando al aleccionador Cuarteto de Alejandría ,  con el que sigo aprendiendo .

   En cuento me fué posible ,  eliminé los exámenes ,  sustituídos por una entrevista personal en junio .  Realizada en mi despacho ,  diálogo socrático con el siguiente esquema :

1.- Elige el tema que más te haya costado preparar .  Exposición y subsiguiente coloquio esclarecedor 

2.- De las clases prácticas ,  elige el comentario que más te haya gustado .  Exposición y coloquio .

3.- De los libros leídos ,  elijo yo uno de tu lista y me dices cómo lo fuiste leyendo y anotando .  Gran coloquio .

Al final le preguntaba por la nota que creían merecer ,  la discutíamos y se la llevaban puesta .  Poco a poco lo fueron aceptando con naturalidad .  Y así ,  hasta el final de mis días académicos .  Eppur si muove ...

martes, 8 de diciembre de 2020

SEGUNDA ETREGA

 PEQUEÑA  REVOLUCIÓN  EN  LA  UNIVERSIDAD



  Todo comenzó una tranquila tarde de otoño .  Cursaba yo el cuarto curso de la Licenciatura de Filología Románica en la recoleta universidad de Murcia ,  utilizando su principal Seminario como mi segunda casa ,  todo rodeado de armarios de roble repletos de libros .

   Deseaba realizar mi Tesis de Licenciatura .  Entré al despacho de mi maestro ,  el Caedrático Mariano Baquero Goyanes .  Hablamos largo  y tendido y ,  tras algunas dudas sin importancia ,  concretamos el título :  "La narrativa de Cela" . 

    Debo decir que terminé las anotaciones investigadoras en el veraniego campamento de Milicias universitarias ,  ante la sorpresa del capitán ,  que se extrañaba de verme siempre con un libro bajo las encinas .  Un día me preguntó dónde dejaba el libro cuando comenzábamos las clases de estrategia militar .  Y entonces conoció una de las muchas utilidades del  "mono  caqui"  con su iprescindiblle cinturón bien apretado .  " ¿ Los escondes en el regazo ? " .

   En el proceso de elaboración ,  quinto curso ,  contacté con el autor de  "La  colmena" ,  de cuya etapa conservo unas valiosas cartas suyas muy aleccionadoras .

   Pasaron los años ,  terminación de estudios ,  locura de las oposiciones ,  familia constituída ,  vitalismo desbordante ,  cátedras logradas ,  trabajo intenso ,  cambios de todo tipo,  deseos de cambiar el mundo ,  como corresponde a esa edad y peripecias .  Hasta que un día me encontré fijo y seguro dando clase en la Universidad .  El mundo a mis piés sin la menor duda ,  así lo creía entonces .

   Otro buen día ,  me ví rodeado de un buen equipo ,  alumnos y profesores ,  trabajando por modernizar nuestra parcela en la universidad .  Comenzamos por sacar a la calle aquello que nunca debió quedar encerrado en los claustros .  Y para que la calle entrara en esos claustros ,  derecho inalienable ,  si que con las debidas prevenciones ,  orden y concierto .  Y dimos en crear lo que llamamos  LITERATURA  VIVA ,  es decir ,  los buenos escritores visitando aulas y conversando de lo divino y lo humano a través de sus libros .

   Al propio tiempo ,  mi empeño se orientó ,  también ,  a propiciar  "Doctores honoris causa",  incorporados a la universidad como maestros prestigiosos capaces de ofrecer magistrales lecciones necesarias .  En pocos años logramos tres :  Jorge Luis  Borges ,  Mario  Vargas  Llosa  y  Camilo J.  Cela .

   Hoy me ocupa el tercero ,  cuyo proceso vino a poner de relieve la grandeza de la universidad como institución ,  la miopía de muchos profesores y la espontaneidad justiciera de innumerables personas .

   Comenzamos el proceso .  Para entonces ,  el autor de  "La colmena" ya nos había visitado en varias ocasiones ,  todas gratificantes .  Lo aprueba el Departamento de Literatura ,  lo aprueba la Facultad de Letras y llega su discusión al Claustro de la Universidad .  Y hete aquí la sorpresa .

   Como responable de la propuesta ,  me invitan a sesión plenaria  "para defender la candidatura" .  Primera interrogante de un alumno de Letras :  " ¿ Defender la candidatura de un escritor como el autor de  "La familia de Pascual Duarte ?".

   Templé los ánimos y aparecí en la peregrina sesión con cierto grado de ajena vergüenza .  Hice lo que se me pedía ,  con la mayor discreción posible .  Y renuncio a transcribir la intervención de algunos catedráticos ,  uno de Letras y otro de Medicina entre ellos .  Para la ignorancia y la osadía torpe siempre tuve piel de elefante .

   Y aquí la segunda morrocotuda sorpresa :  el Claustro decide ,  por mayoría ,  negar el título de Doctor honoris causa al  autor de  "Madera de boj" .

   Al numeroso personal irritado ,  procuré tranquilizarlo con un conocido verso :  " Cosas veredes ,  buen Cid ,  que farán fablar las piedras " .  Y al cabo las piedras hablaron ,  vaya si hablaron y de qué manera .

   Pero antes de estas  "fablas"  positivas ,  interesan dos inmediatas a tan gloriosa decisión .  Un catedrático de Letras ,  miembro del claustro ,  declaró a un periódico local sin empacho :  "Ya tenía yo ganas de suspender a un Premio Nobel" .  Y un catedrático de Medicina :  " No lo aprobamos porque aquello era  "seguidismo"  (sic) " .  Que Santa Lucía les conserve la vista .  Y San Buenaventura la ética .

   Y la gente se dijo y nos dijimos todos :  " Ladran ,  luego cabalgamos " ,  parodiando amistosos a Descartes .  Y hablaron las piedras  y cabalgamos con alegría y denuedo .

He aquí unos cuantos cantos rodados ,  de los muchos bajo el río ,  con cuyas aguas pretendimos ,  y  logramos ampliamente ,  lavar y   "desfacer el entuerto"  cometido por otros ignaros y pandemoniastas .

  Aquí termino la primera entrega . Continuará mañana .