viernes, 14 de febrero de 2020

HISTORIA VIVA DE UN PROFESOR ( 5 )

CABE  NUMANCIA ,  RUINAS  DE  FUEGO  HISTÓRICO


   Lo cierto es que Chavaler ,  nuevo pueblo de destino ,  era un pueblo mucho más pobre que el anterior ,  gentes más hurañas arañando la inhóspita tierra para arrancarle lo indispensable con vistas a la supervivencia un tanto miserable .  Tiempos duros de postguerra en geografía poco acogedora .
   Ello no obstante ,  los niños vivían felices entre sus juegos ,  la escuela exigente y amable ,  su padre el maestro indipensable ,  y su madre para todo ,  incluídas las tardes  de lectura y meriendas pírricas que lograba presentar como exquisitos manjares .
   A dos kilómetros de Numancia y siete de la capital ,  algo de cosmopolitismo incipiente comenzaron a vivir ,  aunque la escasez alimentaria se dejaba notar .
   Seguían las cartillas de racionamiento con sus cupones amenazantes y ominosos ,  sobre todo para el pan solo disponible como minihogazas de color negro que pronto se terminaban .  Los niños no comprendían cómo sus padres se mostraban tan inapetentes , dejando corruscos para incrementar las exiguas raciones infantiles .
   El gran acontecimiento vino cuando nació su única hermana ,  de nombre Marisol ,  aunque en realidad se le impuso el de Maria de la Soledad ,  después de amable discusión entre sacerdote y padre de la criatura ,  justo en la sacristía a la hora del bautizo .
  La nche del nacimiento resultó espectacular y misteriosa . Los dos hermanos dormían en la alcoba sin ventanas ,  a la que se accedía a través del dormitorio de lospadres .  Los mandaron a dormir más temprano que de costumbre ,  pero la curiosidad sin límites del mayor le impulsó a dejar una rendija de la puerta para ver lo que iba a suceder con las horas .
   En efecto .  En torno la caliente chimenea se hallaban dos amigos del padre ,  solidarios ,  y dos mujeres activas que preparaban sábanas ,  agua caliente en grandes barreños y otros adminículos pertinentes al caso .  El iño escuchaba las conversaciones ,  hasta que la mujer más experti dijo :  " Señora maestra ,  el niño ha sacado un pié ,  vamos a la cama " .  Ciertamente ,  la niña venía de la dorma mas difícil y comprometida ,  pues no había médico .  Movimiento ,  carreras ,  tráfago incesante ... hasta que la niña dió el primer grito .  El hermano se enteró absolutamente de todo ,  eso sí , con los ojos cerrados para no llamar la atención .  Y así vino una nueva y floreciente vida al mundo ,  para felicidad de todos .
   La vida continuaba fluyendo .  Cabe decir que había un río cangrejero ,  de nombre Tera y afluente del Duero allá por Garray .  Los niños aprendieron a pescar ,  de manera especial abundantes cangrejos que servían para opíparas cenas :  la madre los preparaba con patatas fritas ,  delicioso manjar .
   Un día a la semana ,  hijo mayor y padre viajaban a la capital ,  pues el Auxilio Social disponía una cesta bien surtida de lechhe condensada ,  chocolate ,  cereales ... como parte de la ayuda para la niña y la madre gestante válgame Dios .
   Vida bastante chata y ramplona .  Y aún así ,  valga otra anécdota para la sonrisa .  Los semanales viajes a la capital los hacían a pie ,  pues que siete kilómeros eran pocos y estimulantes .  Pero regresaban en autobus ,  por una razón fundamental :  en la parada de Garray estaba la tahona que disponía el pan de ración .  El padre permanecía sentado liando el enésimo cigarrillo de picadura .  El niño cogía la floreada bolsa con anillas de hierro ,  entraba en la panadería y solicitaba el pan ante la sonrisa cómplice del dueño ,  amigo del señor maestro y que le decía :  " Pero no te lo llevaste ayer por la mañana ? " .  El niño respondía con aplomo , según enseñanza del padre :  " No señor ,  fue la semana pasada" .  Y se llevaba la segunda ración semanal ,  que el padre pagaría cuando conviniere .
   Rondeau final numantino .  A un kilómetro de casa había una pequeña granja con cabras .  Todos los días ,  a la salida de la escuela por la tarde ,  el futuro profesor cogía la lechera de aluminio y allá se encaminaba ,  para proveer los biberones de la hermana .  Incluso aprendió a ordeñar las cabras ,  gozando mientras contemplaba como los chorros levantaban graciosa espuma en la lechera .
   Vino la primavera ,  llegó el verano y ,  cuando el otoño asomaba cercano ,  prepararon los bártulos para emprender camino hacia la nueva población ,  Duruelo de la Sierra .  Y aquello fue la gloria para estos trahumantes de la enseñanza , la buena educación y el crecimiento persona que un día daría ópimos frutos ,  según la hermosa ,  callada y sufrida previsión de unos padres ejemplares ,  conformadores de hermosos mundos futuros .  
   Sic transit ....

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