Voy a terminar , Carmen , con el asunto y tema Octavio Paz que , como bien recuerdas , dió para mucho en aquella su primera visita a Murcia . Lo pasamos muy bien , lo pasaron bien los cientos de personas aquella semana para recordar lo vivido .
Como sabes , me ofrecí a viajar con ellos a la capital del reino , una mínima delicadeza para corresponder a su finura con nosotros . Octavio insistía en que no me molestara , que demasiado amables habíamos sido con ellos . Como es obvio , no le hice caso y todo resultó bien incluso , y sobre todo , para afianzar una amistad naciente .
El día del recital , nos vimos en la rotonda del hotel Palace , donde se alojaban , para una entrevista que la revista Telva había concertado . Octavio asistió impecablemente vestido , nada que ver con las indumentarias de Murcia y sus trochas y veradas , triscando montes . Misntras esperábamos , tomamos un zumo de naranja que me sorprendió , no tanto por la calidad y vajilla (que también) , sino por el precio que vi anotado en la comanda que firmó el poeta .
En esto que llegaron los periodistas . El fotógrafo lo fue preparando toda para el mejor resultado . Y a punto estab de disparar la cámara cuando apareció Mary Jo de punta en blanco . Corrigió todo lo corregible y más . Baste decir que probaron más de diez posicionesy ubicación antes de realizar , como mínimo cuarenta fotos a efectos de elegir la idónea .
Descansamos un poco después de comer y nos encaminamos a la Residencis de Estudiantes .
Primera parte , la mitad de asistentes que en Murcia . Segunda parte , sólo el escritor en la mesa ad hoc . Tercera parte , leyó menos de la mitad de textos que con nosotros . Tercera parte , no hubo coloquio .
Eso sí , asistió la esposa del Presidente , profesora doña Carmen Romero . En cierto modo , aquello pareció un acto social más que un recital de poesía . Sic transit...
Terminado el recital , vinieron los corrillos , los comentarios , los saludos y demás parafernalia del caso .
Yo estaba con el catedrático de Literatura Hispanoamericana de la Complutense . Me despedí del matrimonio porque debía regresar a Murcia . Y cuando descendíamos la pequeña colina , el catedrático me dijo que no conocía personalmente al escritor . Mi sorpresa fué notable , pues Paz viajaba a Madrid con frecuencia . Así que detuve el paso y volvimos decididos a la residencia . Se lo presenté , lamentaron no conocerse todavía , charlaron amablemente y quedaron en verse la próxima vez , a ser posible en la Facultad de Letras madrileña.
Ya ves , Carmen . Cuando a mi regreso te conté estas incidencias , no dabas crédito a la historia , no te lo podías creer . En fín , vivir para ... vivir mejor .
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