Llegó a Murcia por primera vez cuando aún no había recibido el Nóbel , como consecuencia de un proceso bastante rocambolesco y , en cierto modo , de humor esperpéntico .
Resulta que , una vez asentado el nuevo rumbo de "mis" Letras en la universidad , pensé que una manera buena de extroversión consistía en dispensar el título de Doctor honoris causa a ilustres personajes , de las humanidades en nuestro caso .
Pensado y hecho . El resultado es que hoy tenemos tres grandes hispanoamericanos en el palmarés : Borges , Sábato y Vargas Llosa , que no es mal record .
Cierto que era catedrático de literatura hispanoamericana , y dejaba para los demás las posibles propuestas en su campo de acción . Pero me recordó el equipo que también lo había sido de española durante bastantes años .
Si a ello añadimos que no surgieron proposiciones en su amplio territorio , pues que nos animamos a elegir a Cela .
La máquina se puso en movimiento y unos meses después , con todas las bendiciones favorables de mi Depaartamento y la Facultad de Letras , me ví defendiendo la propuesta en el amplísimo claustro de la Universidad , pensando que sería puro trámite pues todo el mundo conocía al escritor famoso y respaldarían a la Facultad .
Ingenuidad por mi parte . Ante el asombro de medio mundo , un claustro desnortado , ignorante y con escaso amor por nuestra alma mater , le negó el placet .
Un profesor de química dijo que ya eran demasiados títulos . Otro de crítica literaria afirmó que ya tenía ganas de suspender a un Nóbel . Y un tercero , por citar sólo a los más gloriosos hablantes y escribientes , vino a decir (siendo él catedrático de literatura) que Cela era un escritor de segunda categoría . Y uno de medicina acuñó el término "seguidismo" para calificar la situación provocada .
Ninguno sintió verg¨uenza .
Bueno , pues "hic Troia fuit" . Se produjo un fenomenal escándalo , como era esperable . Y desde cualificadas personas cultas hasta instituciones de todo tipo , me propusieron "desagravios" adecuados al desaguisado .
Citaré tres . El ayuntamiento de Murcia le dedicó una hermosa plaza . La asociación de amigos de la capa lo hizo presidente de honor . Y la madre de un alumno que trabajaba en mi equipo , se presentó en mi despacho para decirme que aquello no podía quedar así .
Pero esto lo dejo para mañana , no os defraudará .
¿ Recuerdas , Carmen , el enfado faraónico que cogiste ante la insólita y aldeana reacción del claustro ? Y del mismo modo lo bien que te lo pasaste los meses siguientes , participando en todas las reivindicativas , la mayor parte jolgoriosas . La verdad es que nos divertimos mucho con aquel aquelarre cultural , que terminó de la manera más brillante .
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