Nos sentíamos como pez en el agua , tú la primera , Carmen , que participabas en todo con juvenil entusiasmo , no sé cómo podías encontrar tiempo para tanto ajetreo , madrugadas de largas charlas incluídas . Pero así era y así lo vivíamos .
Pensamos en un primer nombre americano y coincidimos en Mario Benedetti , poeta y narrador , por entonces con gran predicamento entre los jóvenes .
Lo invitamos iniciando un método que fuimos perfeccionando con buenos resultados . Primero una conversación telefónico , a este respecto recuerdo , Carmen , las veces que me decías "tú sin un teléfono eres con normal , pero con un teléfono a mano eres capaz de revolucionar el mundo" . Así ha sido siempre .
Después le enviamos una amable carta con tintes oficiales , para que no todo quedase en volanderas palabras .
En su momento , una parreja de jóvenes del equipo lo recibió en el aeropuerto de Alicante y lo trajeron al hotel Arco de San Juan , donde tú y yo lo esperábamos .
Un café humeante , una charla amistosa y descanso hasta la hora de la cena , a la que habitualmente asistía la parte del equipo disponible , los más cercanos al escritor , así como alguna otra persona especialmente interesada .
Y así hasta el día siguiente para poner en práctica la fórmula horaciana de mezclar lo dulce con lo útil .
Pero eso lo contaré mañana .
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