FRANCISCO UMBRAL , EL ICONOCLASTA
Iconoclasta , pero no tanto . Si acaso de cara a la galería semianalfabeta que a todas partes lo seguía , sin llegar a conocerlo , y todo se lo aplaudía sin entenderlo .
El de Umbral es un curioso caso de personaje impostado a la manera y formas de Cela , otro que tal . Su planta y sus desplantes vendían mucho para los superficiales y deseosos de pequeños escándalos sociopolíticosexuales , un poco el pastode las fieras , tan nuestro por otra parte .
Lo conocí en El Escorial con ocasión de un homenaje a Camilo J. Cela . Desayunamos , hablamos y convinimos algunas cosas . Él ya sabía de nuestras andanzas literarias españolas e hispanoamericanas , precisamente a través del propio Cela . De modo que nos emplazamos para cerca conversación , sobre la base de que no viajaría a provincias por obvias razones . En ello quedamos .
Mientras tanto se produjo el affaire Cela y sus notorias consecuencias , que Paco siguió puntualmente . Y llegó el momento de la definición y el compromiso en serio .'
Me llamó una tarde para decirme que lo había pensado mejor y estaba dispuesto a viajar a Murcia , como excepción y rompiendo su ya inveterada costumbre de no abandonar Madrid y sus alrededores . Me pareció bien .
Lo preparamos todo adecuadamente , para corresponder a su gentileza de visitarnos . Y quedó encantado , tanto por lo referente a la parte académica y de estudio , cuanto por la parte humana del recibimiento y estancia entre nosotros ya que , según repetía , no estaba acostumbrado a tales encuentros y su entorno . Se lo agradecimos .
Nos ocupamos de sus novelas y del escalofriante libro poético "Mortal y rosa" , consecuencia de lo más terrible que puede acontecerle a un padre . Su emoción ante las palabras escuchadas fué sublime y patética , sin duda .
Pero la gran atención se fijó en sus artículos de periódico , pues fué uno de los grandes periodistas no solo de su generación , aunque sigo creyendo que tanto éxito periodístico perjudicó en buena medida a su dimensión de narrador , que pudo haber sido mucho más completa y profunda , un poco a la manera de su mentor Miguel Delibes , quien siempre antepuso su narrativa al más perecedero artículo diario .
Se empeñó en que también lo invitara a mi veraniego curso de El Escorial , lo que hice con gusto , donde tuvo el eco que cabía esperar .
Tuvimos un continuado trato amable y cordial , aunque no de firme amistad , pero siempre lo recuerdo con agrado y hablo de su escritura cada vez que me lo solicitan .
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