LEER O NO LEER , HE AHÍ LA CUESTIÓN
El profesor lo sabía desde la niñez , gracias al ambiente de su propia casa (padre maestro nacional , madre cultísima) , lo respiraba , el ejemplo ... y la suave imposición previsora de los dos progenitores , incrementada por el ambiente de la escuela . Al cabo , realidad educativa de donde proocede todo bien .
Nunca olvidó la canción aprendida el Día del Libro :
Si quieres un buen amigo ,
que te sea siempre fiel ,
que no te moleste nunca ,
que en vez de quitar , te dé ,
busca un libro provechoso ,
léelo con interés
y ya verás como es cierto
que te brinda sólo bien ...
Ahora se encuentra junto a docenas de estudiantes universitarios en el aula . Con una idea preconcebida , genralmente falsa : los estudiantes de Letras leen por vocación gustosa . No era así , bien lo sabía por sus compañeros de pupitre , cuya mayor parte leía sólo por orden del buen profesor .
Duda razonable , de difícil solución . Lo pensó mucho antes de tomar una decisión . Sus profesores nunca obligaron a leer , aunque fuera por exigencias de la profesión , si acaso algunas sugerencias y citas de libros importantes . El resultado era sorprendente : casi todos los estudiantes manejaban los prólogos de las ediciones críticas , con ello bastaba para aprobar exámenes , incluso con buenas notas .
Finalmente se decidió . Confeccionó una lista de lecturas obligatorias , diez para todo el curso , que podrían distribuir por trimestres para mayor comodidad y soltura , a su libre albedrío .
Las protestas discretas no se hicieron esperar . Demasiado trabajo , muchas horas dedicadas a la lectura de libros ya "explicados" en clase , un poco de comprensión ... En fín , no había marcha atrás . Habló con los alumnos todo lo que fué necesario, con un corolario inamovible : quien no lee mucho y bien , nunca podrá ser buen Licenciado , mucho menos profesor de Literatura . Y pues que no se hacía motu proprio , era necesaria la obligación metodológica de trabajo .
Cuando se calmaron las aguas , surgió la pregunta obligada : ¿ Cómo iba a repercutir aquello en el examen ? Era natural su preocupación , pues no estaban acostumbrados a estas innovaciones .
Procuré calmarlos diciéndoles que redundaría en beneficio , nunca a la contra , era cuestión de encontrar la forma .
Cabe decir que , a la sazón , todos los exámenes eran escritos , en general tres temas para desarrollar en una hora (dicho sea de paso , camino fácil para la "copia y la chuleta" con profesores desprevenidos) .
Les explicó . Ellos leían el libro en casa , tranquilamente , profundizando cada uno según sus capacidades , atención y preparación remota . Eso sí , siempre con folio y bolígrafo al lado para las pertinentes anotaciones , sugerencias y dudas , anotaciones que también podrían incorporar en los márgenes del libro , de manera que sus páginas no resultaran virinales al final , considerado el volumen como herramienta de trabajo .
Les costó adaptarse , dos o tres años de pruebas , rectificaciones y otras formas de encauzamiento , pero finalmente todo les pareció normal , bueno y necesario para aprender más y mejor .
Se había salvado el libro como objeto que duerme en los anaqueles . Antes al contrario , pasó a ser considerado como inseparable amigo , que los acompañaba siempre , para el trabajo placentero y el placer compensador .
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