miércoles, 29 de enero de 2020

ROSAS DE OTOÑO ( 8 )

PERO ,  ¿  DÓNDE  QUEDÓ  EL  EVANGELIO ?

   Esta mañana ,  Carmen ,  me siento un poco desplazado y perplejo  ,  como en aquel romance popular cuyo pastor ,  en la noche ,  contemplaba  "las cabrillas altas iban y la luna rebajada " .  Asi me siento .  Y pronto ,  según ma veyas leyendo ,  averiguarás por qué ,  querida que y te fuiste y estás siempre tan presente conmigo .
   Hoy tenemos fiesta .  A media mañana he conectado la televisión y me han sorprendido dos programas ,  si que distintos ,  unidos por undenominador común : las creencias religiosas .
   Teología elemental y necesaria .  El hombre ,  por naturaleza ,  es religioso .  Necesita la trascendencia para convertir su vida en algo más que un determinismo biológico .  Y pues que ha sido agraciado con el poder inmenso de la razón ,  será su capacidad de razonamiento sensible la encargada de organizar el trasmundo sobre la base de tres elementos constituyentes :  la fé ,  la esperanza y la caridad .  Es decir ,  el amor lo determinará todo ,  primero aquí en la tierra ,  después en el misterio que anima la esperanza .  Nos dicen desde siempre :  si tengo amor , todo lo tengo ;  sin amor ,  no tengo nada .  Y añado una apostilla paulina : cuando era niño ,  me ocupaba de las cosas de los niños ;  ahora que soy hombre ,  me ocupo de las cosas de los hombres .  Evangelio puro .
   Y para mejor entendimiento global y compartido ,  os cuento mi pequeña historia ,  que tambien es tu historia ,
tú que fuiste mucho más acendrada creyente que yo .
   Me nacen en un pequeño pueblo montaraz .  Y me bautizan ,  es decir ,  me constituyen miembro de la iglesia ,  cuya asamblea la constituimos todos ,  desde el más tierno infantito hasta el filósofo más profundo .  Y no importa que fuere cristiano ,  budista o mahometano convencido ,  pues al cabo todas las religiones son una y la misma en esencia ,  no importa las formas concretas que puedan adoptar .  El bautismo nada negativo aportó a mi vida creciente .
   Después vino la primera comunión ,  la confirmación y el resto de sacramentos que me iban afectando ,  teniendo en cuenta siempre mi creciente capacidad de pensar ,  bajo la égida de otra proposición paulina plausible : la fé es un obsequio razonable que el hombre hace a Dios .
   Yo seguía estudiando y creciendo ,  más o menos modestamente ,  en edad ,  sabiduría y gobierno de mi propia vida en relación con la vida de los demás ,  es decir ,  mis prójimos .
   Desde los años de bachillerato , me interesó el fenómeno religioso en amplitud ,  y algo llegué a saber de su entraña y manifestación .  Recuerdo mis primeras discusiones con dos amigos frailes ,  un franciscano y un jesuita .  Fecundas y aleccionadoras .  Y fui a la universidad ,  y alcancé a ser doctor en mi especialidad ,  incluso llegué a catedrático .
   Un buen día ,  leí a Teilhard de Chardín y me identifiqué con sus propuestas ,  postulados y visión del mundo via religión ,  que es tanto como decir via humana sin limitaciones .  Y continúo siendo un hombre religioso ,  sin que la fé y la ciencia signifiquen contradicción alguna ,  antes al contrario ,  armonizo bien los dos caminos que mutuamente se complementan y armonizan .
   Todo sobre la base del Evangelio ,  ni más ni menos .
   Pero claro ,  en el interim vinieron los filisteos , se apoderaron del Evangelio y lo fueron sepultando poco a poco ,  envuelto en insoportable burocracia conducente a una extraña jerarquía de poder escasamente divino . Incluso sus jerarcas han llegado a autotitularse Prícipes de la Iglesia :  si no fuera para llorar ,  sería para estar riendo hasta la consumación de los siglos .
   Varios Papas en mi vida ,  desde el hierático Pio XII . Me impresionó el formidable Juan XXIII ,  que tanto bueno hizo ,  pero que muy pronto se apresuraron a oscurecer su obra los jerarcas y fariseos de siempre .  Él si conocía bien el Evangelio y su capacidad transformadora y redentora .  Ahora conozco al papa Francisco ,  al que tantas trabas andan poniéndole sus  "cortesanos eclesiáticos"  de turno .  Ellos afianzan mi fé ,  incrementan mi esperanza y hacen más comprensivo mi amor por todo y por todos .  Ah ,  la  "charitas"  agistiniana ! .
   Aún así ,  repito :  ¿ dónde quedó el Evangelio ?

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